El viernes 22 de noviembre de 2013, miembros de la Brigada Investigadora de Delitos Económicos (Bridec) de la PDI llegaron hasta la comuna de San Bernardo, en donde tomaron detenido a R.M.C. (45), quien trabajaba como topógrafo en uno proyecto en el sector.
La detención se produjo a partir de que el acusado, habría hecho “ejercicio ilegal” de la profesión de Topógrafo (Geomensor), puesto que el imputado solo tiene estudios hasta sexto básico.
El caso salió a la luz a causa de que R.M.C. fue uno de los topógrafos de un costoso proyecto (mas de 31 millones de dólares) para la construcción de un puente levadizo en la ciudad de Valdivia, el primero de su clase en el país. Tras esto, la empresa encargada de la obra dio cuenta de irregularidades en la documentación profesional del "supuesto geomensor". De esta manera el Ministerio Público se hizo cargo de las investigaciones a las que se suman las denuncias que también efectuó la Universidad Tecnológica Metropolitana (Utem), supuesta institución de egreso del acusado.
El caso despertó inmediatamente repercusiones en Cayucupil, ya que esta persona fue uno de los encargados de la topografía en la ejecución del proyecto de reparación del Canal de Regadío de Cayucupil en 2010, obras realizadas tras los serios daños que provocó el terremoto del 27 de febrero. Este proyecto tuvo una inversión de más de 700 millones de pesos.
Según versiones de expertos, eventualmente la participación de personal “no calificado” en decisiones estratégicas puede generar enormes pérdidas económicas para las empresas mandantes, pero en ningún caso podría provocar deficiencias mayores de la estructura, ya que las construcciones son obras de responsabilidades compartidas, de tal modo que el riesgo es menor, siempre y cuando la persona no haya influido en otras etapas de la construcción que no le correspondiesen.
Fuente: Diario La Tercera (
ver)