lunes, 10 de enero de 2011

Excursión nocturna en Butamalal encuentra rana en peligro crítico de extinción.

Rana montana de Nahuelbuta (Telmatobufo bullocki)
Desde hace décadas la Cordillera de Nahuelbuta ha maravillado a naturalistas y científicos de todo el mundo, atraídos por las particularidades de sus ecosistemas y especies endémicas, aportando constantemente nuevas especies para la ciencia. Uno de los grupos que cuenta con más especies endémicas es el de los anfibios.

De las 14 especies de anuros que habitan Nahuelbuta, cinco (35,7%) son endémicas de esta cordillera, dos se encuentran en peligro crítico, dos en peligro, cuatro vulnerables, dos casi amenazadas y cuatro con preocupación menor.

Los anfibios poseen un ciclo de vida que incorpora, en la mayoría de los casos, una fase acuática y otra terrestre. Así, los arroyos, ríos y otros humedales son de vital importancia para estos animales, que dependen totalmente de ellos para sobrevivir. Además la mayoría de las especies ocupan los bosques nativos adyacentes a estos cuerpos de agua como hábitat en su etapa adulta. De este modo la conservación de las cuencas hidrográficas y de los bosques provee protección y asegura sustentabilidad para las poblaciones de estos animales.

Durante décadas la destrucción del bosque nativo y su sustitución por plantaciones forestales exóticas, junto con la modificación de los ríos para la extracción de áridos, han mermado las poblaciones de anfibios a escala regional y mundial. Estos factores afectan de manera significativamente mayor a las especies endémicas y con poblaciones reducidas, debido a su área de distribución restringida y vulnerabilidad a cambios ambientales. Diez de las 14 especies de anuros que habitan Nahuelbuta se encuentran amenazados. Los casos más graves corresponden a la Rana de pecho espinoso de Nahuelbuta (Alsodes vanzolinii) y la Rana montana de Nahuelbuta (Telmatobufo bullocki), ambas catalogadas como En peligro crítico de extinción por la IUCN.

Actualmente una nueva amenaza se cierne sobre el hábitat de estas especies: la construcción de centrales hidroeléctricas de paso que modificarían de manera sustancial los cursos de agua, afectando de manera directa la viabilidad de las poblaciones de anfibios con problemas de conservación. Dos casos son conocidos para nuestra zona, las centrales de los ríos Cayucupil y Butamalal. Estas centrales pretenden entubar casi la total extensión de ambos ríos, cambiando drásticamente su fisonomía.

Durante la semana pasada (5 y 6 de enero) tuvimos la oportunidad de recibir la visita de un herpetólogo experto en anuros nativos: Felipe Rabanal, quien cursa un doctorado en la Universidad Austral de Chile y además es uno de los dos autores del libro “Anfibios de los bosques templados de Chile”. Aparte de desarrollar destacados trabajos experimentales enfocados a ámbitos que atañen casi exclusivamente a los especialistas en el área, Felipe ha demostrado especial interés por bajar el conocimiento a la población general, la gente corriente que no esta familiarizada con terminología científica, desarrollando de este modo la educación ambiental que tanto hace falta en estos días. Actualmente mantiene el sitio www.anfibiosdechile.cl

Durante la visita de este eminente herpetólogo, pudimos realizar dos excursiones nocturnas en busca de varias especies de ranas amenazadas. En ellas participó la especialista Virginia Moreno, quien cursa estudios de postgrado en Nueva Zelanda, además del técnico forestal Edgardo Flores (conocido por su importante trabajo en informar sobre las centrales hidroeléctricas) y el fotógrafo Ramón Reyes.

Ranita de Contulmo (Eupsophus contulmoensis)
La primera excursión se desarrolló en la rivera del Río San Ernesto, en la comuna de Contulmo. Allí pudimos encontrar con gran asombro y felicidad a una de las especies más críticamente amenazadas en la zona y a nivel país: La Rana Montana de Nahuelbuta (Telmatobufo bullocki). Sólo pudimos encontrar larvas (renacuajos), lo que no deja de sorprender ya que nunca estas habían sido fotografiadas. Además encontramos una larva en estado premetamórfico, con sus extremidades en pleno desarrollo, mostrando su morfología particular en una etapa nunca antes vista.

Las larvas de esta especie están particularmente adaptadas para la vida en ecosistemas lóticos (de aguas rápidas) de corrientes fuertes y riveras pedregosas. Su cuerpo aplanado y sus ventosas bucales especializadas (disco oral) le permiten aferrarse a las rocas sin ser arrastrados por la fuerte corriente.

Ranita de Nahuelbuta (Eupsophus nahuelbutensis)
La segunda excursión nocturna se realizó en el Río Butamalal, en la comuna de Cañete. Bajando hacia el río por el bosque al oscurecer pudimos encontrar varias especies de anfibios amenazados y en cantidades no despreciables: Rana de hojarasca de Contulmo (Eupsophus contulmoensis), Rana de hojarasca de Nahuelbuta (E. nahuelbutensis) y Ranita de Darwin (Rhinoderma darwinii), las dos primeras en peligro de extinción y la última vulnerable.

Avanzada la noche hicimos un hallazgo realmente sorprendente. Dos ejemplares de Telmatobufo bullocki, un juvenil y un adulto. El primero a 200m del río y el segundo en la rivera del mismo. Ambos ejemplares presentaron una coloración mostaza, inusual para la especie, que suele ser más oscura, casi negra en la parte superior. Ambos ejemplares fueron fotografiados y se les tomaron muestras de ADN mediante una técnica no invasiva.

Ranita de Darwin (Rhinoderma darwinii)
El hallazgo de larvas de Telmatobufo bullocki en el Río San Ernesto, y de ejemplares juveniles y adultos en el Río Butamalal, demuestran que estos ríos aún se encuentran en condiciones saludables y que permiten además la existencia de otras especies amenazadas, no tan solo de anfibios sino también de peces nativos y aves especialistas de este tipo de ríos como el Pato cortacorrientes (Merganetta armata), que tiene a Nahuelbuta como su única área de distribución fuera de la cordillera de Los Andes.

El solo hecho de que en Butamalal se hayan encontrado en tan solo una noche a cuatro especies de anfibios anuros amenazadas de extinción, entre ellas una en condición crítica, nos obliga a pensar en la protección ineludible de este valiosísimo río, hoy amenazado por la construcción de una central hidroeléctrica. Además en el vecino río Cayucupil, que se encuentra bajo la misma amenaza, también se encontraron las tres especies amenazadas, y muy probablemente alberge también a individuos de Telmatobufo bullocki, debido a que cuenta con las condiciones adecuadas para esta especie.

Otro punto interesante es que en los bosques que rodean a estos ríos se ha encontrado evidencia de reproducción de especies de aves que se encuentran dentro de las más amenazadas a nivel nacional, como el Concón (Strix rufipes), el Peuquito (Accipiter chilensis) y el Aguilucho chico (Buteo albigula), especies especialistas de bosque y consideradas como raras o inadecuadamente conocidas.

En definitiva, podemos decir con la total certeza que nos proporcionan estas pruebas, que las cuencas de los ríos Cayucupil y Butamalal si cuentan con un importantísimo valor ecológico (a diferencia de la información entregada por la declaración de impacto ambiental), ya que albergan a un numero significativo de especies con problemas de conservación, siendo quizá Telmatobufo bullocki la mas importante, ya que se encuentra en peligro crítico y la construcción de las centrales hidroeléctricas exterminarían sin duda alguna estas poblaciones, terminando con uno de las últimos refugios para esta especie en franco retroceso poblacional.

Es responsabilidad de todos velar por la preservación y cuidado de estas cuencas de alto valor biológico y decir con fuerza de una vez y por todas: NO A LAS CENTRALES HIDROELÉCTRICAS EN LOS RÍOS DE NAHUELBUTA!. No podemos permitir que proyectos que benefician a unos pocos acaben con nuestros más valiosos patrimonios naturales. No podemos permitir que esos proyectos acaben con las tradiciones recreacionales que se han desarrollado por generaciones. Es nuestro deber poner luz roja a estas iniciativas nefastas para el pueblo y la naturaleza.

Lista de especies presentes en Nahuelbuta y estado de conservación según IUCN.
En Rojo especies encontradas en ríos Cayucupil y Butamalal.
Rana de pecho espinoso de Nahuelbuta (Alsodes barrioi) – Vulnerable
Rana de pecho espinoso de Ramadillas (Alsodes vanzolinii) – En peligro crítico
Rana moteada (Batrachyla leptopus) – Preocupación menor
Rana de antifaz (Batrachyla taeniata) – Preocupación menor
Rana grande chilena (Calyptocephalella gayi) – Vulnerable
Rana de hojarasca de Contulmo (Eupsophus contulmoensis) – En peligro
Rana de hojarasca de Nahuelbuta (Eupsophus nahuelbutensis) – En peligro
Rana rosácea de hojarasca (Eupsophus roseus) – Casi amenazada
Rana grande de hojarasca (Eupsophus vertebralis) – Casi amenazada
Rana esmeralda (Hylorina sylvatica) – Preocupación menor
Sapito de cuatro ojos (Pleurodema tahul) – Preocupación menor
Sapo de manchas rojas (Rhinella rubropunctata) – Vulnerable
Ranita de Darwin (Rhinoderma darwinii) – Vulnerable
Rana montana de Nahuelbuta (Telmatobufo bullocki) – En peligro crítico

Edición y Fotografías: Tomás Rivas Fuenzalida

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